Tras la edición de su disco de debut Terapia en 2017, que supuso un soplo de aire fresco en la escena de música afrocubana con influencias funk, y sobre todo el éxito de su single “Me Voy”, que puso en el mapa internacional a Cimafunk, el cubano se ha convertido en un referente de los sonidos latinos con más groove. Mientras esperábamos el nuevo álbum, pudimos disfrutar del EP Cun Cun Prá , que contenía tres bombazos como “El Potaje”, “La Papa” y el track que le daba título, además de algunas colaboraciones como con la Fundación Tony Manero.
En este tiempo, el de Pinar del Río ha enriquecido su propuesta con sonidos abiertos a todo lo nuevo, sin olvidar la tradición, uno de los grandes secretos de su estilo, además se ha acompañado del productor Jack Splash y colaboradores de lujo como George Clinton, Lupe Fiasco o CeeLo Green entre otros.
El Alimento, cuyo título según su autor está inspirado en todo aquello que le alimentó espiritualmente durante la pandemia, no solo supera el reto de su fantástico debut, si no que engrandece su paleta de influencias y actualiza su funk latino que hoy en día no tiene competencia. Sin duda uno de los discos de este año. Fresco e intenso, rompiendo los límites del funk con acento y personalidad propia. Cimafunk define así su estilo: “Creo que lo diferente de mi funk es que está como flotando, por encima, está pellizcando el groove afrocubano que tiene la canción debajo”. Si te gustó Terapia, su nuevo álbum El Alimento, va a sorprenderte y engancharte. Un festín para los sentidos, al que no te podrás resistir. Cimafunk está haciendo historia, su revolución ya es una realidad y él es el padrino del nuevo funk cubano.
