Erobique ha regresado con un nuevo álbum después de 25 años y eso es una celebración de grooves que ruedan como un tren interurbano hacia el horizonte, acordes de Rhodes tan suaves como la arena en la playa y sintetizadores que brillan como los reflejos del océano. Música tan colorida como una camisa hawaiana y tan cálida como el sol de la mañana.
El segundo álbum de Erobique se titula: “Erobique No. 2” en su propio sello A-Sexy. Carsten Meyer lanzó su álbum debut “Erosound” en 1998 bajo el nombre de Erobique hace ahora 25 años. Trece pistas diversas en donde han grabado y producido muchos de sus amigos y compañeros. Veinticinco años, ese es prácticamente el tiempo que le tomó a la música disco evolucionar desde las legendarias fiestas en lofts del pionero David Mancuso hasta los impresionantes espectáculos masivos de las actuaciones de Daft Punk.
Meyer ha estado improvisando actuaciones durante años frente a audiencias que bailan. Alguno de sus hits como: «Easy Mobeasy» y «Urlaub In Italien» no son canciones pop al uso, sino que fueron creadas a partir de inspiraciones espontáneas, en la adrenalina, en el flujo de la fiesta, en el medio del momento.
Uno de los retos del nuevo álbum de Erobique era como evocar esos momentos en el estudio sin una fiesta, sin la energía que se derrama sobre el escenario. La respuesta ha estado colaborar con viejos amigos como el baterista Lucas Kochbeck (The KBCs, Bacao Rhythm & Steel Band) o Christoph M. Kaiser, (ex bajista de The Jeremy Days) o la cantante Sophia Kennedy, así como Siriusmo o Nicola Rost que han participado en la producción.
