Si hay una generación de guitarristas que han marcado época en la historia de la sonanta es la de los nacidos en los años cuarenta del siglo XX. Todos siguieron la estela de excelencia marcada por Sabicas y Ricardo, Melchor y el gran Montoya, dando pasos de gigante, renovando el instrumento, tanto el de acompañamiento al cante y al baile, como la guitarra flamenca de concierto, proyectándola al siglo XXI con una solidez de estilo extraordinaria.
Entre ellos tienen un lugar honor los hermanos de una familia gitana de guitarristas de Granada que desembarcaron en el Madrid de los tablaos y formaron el taco. Luis, Juan, Pepe y Carlos forman parte ya de la historia. Pepe, nacido en 1944, sigue mostrando su talento como intérprete y compositor y señalando el camino a los jóvenes para que no pierdan la senda de la flamencura más auténtica. Los ligados de mano izquierda, la melodía siempre cantable, la ornamentación sobria, el pulgar infalible, el rasgueo redondo, la eficiencia en los arpegios, todas cualidades de un guitarrista único, irrepetible.
En su obra discográfica destacan sus grabaciones acompañando el cante, los discos junto a su querido y admirado Enrique Morente con quien Pepe nos regala la mejor escuela de guitarra flamenca de acompañamiento al cante. Otras muchas colaboraciones jalonan una carrera brillante.
Como solista Pepe nos ha legado grabaciones que hoy son clásicas. A Mandeli de 1983, en homenaje a su abuelo, el disco con el que el sello Nuevos Medios de Mario Pacheco iniciaba su camino revolucionario en la industria, después vino Habichuela en rama de 1997, esencias flamencas que incluyen unas seguiriyas airosas, «Amanecer», donde Pepe vuelve a recuperar una forma antigua de tocar por el estilo jondo por antonomasia, que ya había propuesto junto a Enrique en aquel Vaporcito de 1992.
Pepe ha sido el gran renovador de la seguiriya de toque, hasta el punto de que hoy esa manera de tañer el estilo se denomina seguiriya nueva.
Inolvidable es también el disco con la Bollywood Strings de 2001, un ejemplo perfecto de dominio de la guitarra y de la mejor fusión de músicos y músicas. Y el disco Hands de 2010, un encuentro con el contrabajista Dave Holland con quien Pepe tanto ha compartido.