Este viernes 21 de abril se cumplen ya siete años de la inesperada y extraña muerte de un músico grandísimo: Prince Rogers Nelson. Si el púrpura es el color con que se asociará siempre a este Mozart del Funk, el número siete será el número con que se le estudie en siglos venideros. Era su número fetiche por cuestiones espirituales/religiosas, pero también fue el número de años que vivió y produjo arte detrás de su alias/alter ego, glifo diseñado para la portada de uno de sus hits en los 90: “7”, con este número como base.
El número siete aparece a lo largo y ancho de su vastísima obra. Algunos
ejemplos interesantes son “Another Lonely Xmas”, “` Wanna Melt With U”,
“Cindy C.”, “Nothing Compares 2U”, “Sign O’ The Times”, “The Glamorous Life”,
“Let’s Pretend We Are Married”, “The Sacrifice of Victor”, “I Wish U Heaven”,
“Starfish And Coffee”, “I Love U In Me” y “17 Days”.
Prince nació un 7 de junio de 1958. Treinta y cinco años después, el 7 de junio de 1993, anunciaba que a partir de entonces se llamaría «The Symbol» . Y en el año 2000, una vez emancipado de la Warner Bros., volvió a su nombre de pila (que era, curiosamente, el nombre artístico de su padre, pianista de Jazz). En este período de siete años, el genio de Minneapolis compuso y produjo Come (1994), el EP “The Most Beautiful Girl in the World” (1994), The Gold Experience (1995), Chaos And Disorder (1995), Emancipation (1996), Kamasutra (1997), The Truth (1998), Crystal Ball (1998), The Vault…Old Friends 4 Sale (1999) y Rave Un2 The Joy Fantastic (1999). Montó el musical Rock Glam Slam Ulysses (con Carmen Electra como protagonista), y publicó el mítico Black Album el bootleg más caro en la historia de Discogs. Además, su sello NPG Records le publicó tres álbumes a su banda (Goldnigga, Exodus y Newpower Soul).
A pesar de lo impresionante de esta prolífica creación, Prince Rogers Nelson hizo algo mucho más relevante y por lo que raramente es reconocido: revolucionó el negocio de la venta y distribución de música. Nadie vio venir la revolución digital como él lo hizo; el concepto de “música como algo no tangible” que podría ser enviado desde el ordenador del artista al del fan/comprador fue algo revolucionario en su momento (Prince fue el primero – en 1998-, no los Radiohead con su «In Rainbows» de 2007).
Una vez convertido en artista 100% independiente, se borró la palabra “esclavo” de su mejilla e ideó la manera de promover y comercializar sus álbumes. Fue el primero en publicar un single independiente mientras aún estaba bajo contrato (“The Most Beautiful Girl In The World”), el primero en vender su música en internet y línea telefónica a través de un crowdfunding (el triple álbum «Crystal Ball») y el primero en gestionar una gira (se ocupó de la venta de entradas, merchandising y promoción; como resultado ganó 18 millones de dólares en año y medio). En “7” (Lovesymbol (Warner Bros., 1992), su canción/poema de amor, el artista describe el apocalipsis que espera sobrevivir junto a la mujer de su vida (la bailarina de danza oriental Mayté García). Utilizando su intelecto, fe y conocimientos, juntos superarán todo obstáculo en nombre del amor. Existen varias hipótesis sobre el significado de este número en la canción
a) Siete versiones (arquetípicas) de nosotros mismos que debemos aniquilar para estar listos para el amor (el llamado “Proceso de Individuación” de Carl Jung).
b) Los siete pecados capitales (lujuria, gula, avaricia, pereza, ira, envidia y soberbia).
c) Los siete monstruos de la industria discográfica (en 1992: Sony BMG,
Polygram, Universal, MCA, Sony, Warner Bros y EMI. Actualmente, solo quedan tres).
d) Los siete sellos abiertos, las siete trompetas y los siete cuencos de la ira descritos en las profecías del Libro de Revelaciones (El apocalipsis) de la Biblia.
Sea cual fuere la hipótesis más válida, hoy, siete años después de su fallecimiento le recordamos desde Enlace Funk con afecto y agradecimiento por haber creado tanto (neo)Soul, Funk, Jazz fusión, Rock Latin Jazz, R&B. Por haber impulsado tanto el delicioso Minneapolis sound, por haber revolucionado la música y el business. Huérfanos de un coloso de esos que no vuelven a repetirse, desde la Tierra le saludamos. Viva para siempre el poder de la nueva generación.
- “Cuando el quinto de los siete ángeles toque su trompeta, aparecerá
un ángel con la llave del abismo” (Revelaciones, 9:1)
Prince: …Y vi un ángel que descendía sobre mí. En su mano tenía la
llave. (“7”, Lovesymbol album, 1992).